Texturas de los cosméticos, ¿cuál elegir según tu tipo de piel?

La piel de cada persona es única. Por eso, a la hora de escoger un cosmético debes saber con qué objetivo lo usarás (antimanchas, antiedad, hidratación…) además de que textura es la más adecuada. ¿Conoces todas las posibilidades? ¿Sabes qué textura de cosméticos es la que más se ajusta a tu tipo de piel? 

Cuando vas a comprar un cosmético, ¿te sientes confusa ante las diferentes texturas que presentan? ¿Sabías que escoger una u otra depende del tipo de piel que tengas? 

Para elegir entre uno u otro, es tan importante tener en cuenta sus principios activos como sus aditivos y su textura, ya que de esta última dependerán la actuación y la absorción de los excipientes. 

¿Quieres saber qué textura es la más adecuada para tu tipo de piel? Hoy, en Mifarma, te vamos a contar cómo puedes escoger entre las diferentes texturas cosméticas según tus necesidades. ¿Nos acompañas?

¿En qué debes fijarte para escoger un buen cosmético para el rostro?

La formulación de cualquier cosmético consta de aditivos, bases o excipientes y los principios activos o ingredientes principales. 

La forma cosmética o presentación es la manera en que te lo encuentras en nuestra tienda online, es decir, listo para que te lo llevemos a casa, y esto viene determinado por los aditivos y excipientes. Sin embargo, lo que le confiere los beneficios y propiedades al producto son los principios activos.

Bien, ahora que tienes clara toda la terminología, vamos a ver por partes en qué consiste cada uno de estos ingredientes.

1. Aditivos

Son los responsables de la estabilidad de un producto. Se encargan de que se conserve en condiciones adecuadas durante un tiempo, sin perder sus propiedades, y de que se pueda aplicar. Además, de ellos dependen su color, aspecto u olor.

Cuando un producto cosmético da algún tipo de reacción alérgica en la piel, suele ser por una interacción con alguno de sus aditivos.

2. Excipientes

Son los vehículos para que los principios activos realicen su función sobre tu piel. Son responsables del tacto de un cosmético, de su aplicación, de su absorción y de que sea o no adecuado para las necesidades de cada tipo de piel.

Los excipientes son los que van a determinar la textura que tendrá el producto final, así como la experiencia sensorial al aplicarlo sobre tu piel.

3. Principios activos

Los principios activos que contiene un cosmético nos ayudan a saber para qué fin se ha diseñado. Por ejemplo, pueden exfoliar tu piel, reafirmarla, hidratarla, protegerte del sol y un largo etcétera.

En el mercado vas a encontrar una gran cantidad de principios activos, los cuales se pueden clasificar dependiendo de su función:

• Despigmentantes: ácido kójico, láctico, ciertos decolorantes…
• Hidratantes: lubricantes, aceites esenciales, emolientes, tónicos, ácido hialurónico, humectantes, oclusivos, vitaminas, acondicionadores, ceramidas…
• Protectores solares: aquí puedes fijarte en si el filtro que se utiliza es físico, mineral, químico, tiene dos de ellos o, incluso, los tres.
• Reafirmantes: centella asiática, elastina, oligoelementos, colágeno…
• Además de estos principios activos, hay otros muchos como, por ejemplo, aquellos que son abrasivos….

Diferentes texturas para cada tipo de piel

Diferentes texturas para cada tipo de piel

Como sabes, los tipos de piel difieren entre personas. Lo que quizás no sabías hasta ahora es que en una misma persona también puedes encontrar distintos tipos de piel, por ejemplo, en diversas partes del rostro. Por eso resulta fundamental encontrar un cosmético adecuado para ti y una textura adecuada a tu dermis.

¿Te has preguntado por qué algunos cosméticos tienen los mismos principios activos que otros, pero sus texturas no son iguales? Esto se hace para poder cubrir las necesidades que tenga cada rostro de forma particular.

Veamos, a continuación, las diferentes presentaciones en las que puedes encontrar tus cosméticos favoritos:

1. Manteca. Esta textura es untuosa y muy densa. Está indicada para evitar la pérdida de agua, por lo que es ideal para las pieles más secas. Una de las mantecas más utilizadas en dermocosmética es la de karité, debido a sus numerosas propiedades nutritivas.

2. Leche. Son las bases más demandadas para los cosméticos de hidratación corporal, debido a su fácil aplicación y a su rápida absorción. También se utilizan como desmaquillantes.

3. Crema. Su estructura es algo más densa y se suele combinar con otras texturas para que pueda cumplir todas sus funciones.

4. Gel-crema. A pesar de su aspecto cremoso, su tacto es mucho más ligero y su absorción también. Está indicada para pieles acneicas o grasas.

5. Gel. Esta textura, además de ser muy ligera y agradable, es fácil de aplicar en las zonas deseadas. Su absorción es muy rápida.

6. Aceite. En la actualidad puedes encontrar muchos aceites que incorporan vitaminas y se absorben en muy pocos minutos sin que dejen sensación grasa.

7. Sérum. Es una solución que está gelificada ligeramente y que se caracteriza por tener una concentración muy alta de principios activos. Se extiende con facilidad, su absorción es inmediata y está indicada para tratamientos de choque porque su acción es muy rápida. Su acabado es no graso.

8. Solución. Corresponde a un líquido homogéneo muy ligero que se extiende con facilidad y se absorbe con rapidez. Suele ser la base de los booster, tónicos, aguas micelares…

9. Emulsión ligera. Es un producto muy ligero y poco graso, muy utilizado por pieles grasas y normales. Además, entre el público masculino son las más populares porque dejan la piel hidratada y suave sin sensación grasa.

¿Cómo aplicar los cosméticos en función de su textura?

Todas estas texturas ya te dan pistas sobre qué cosmético te va mejor para ti pero, sobre todo, te ayuda a eliminar aquellos que no te convienen.

En tu rutina de belleza, es fundamental tener en cuenta la textura de los diferentes cosméticos que vas a ir aplicando. Te lo contamos todo ya en un post anterior en el que te hablábamos de las diferencias entre un sérum y un booster. Sin embargo, para que te quede mucho más claro, el truco para aplicar los cosméticos es hacerlo desde los más fluidos o líquidos a los más densos.

¿Qué ingredientes no deben faltar en un buen cosmético?

A la hora de escoger un cosmético, debes prestar atención a las diferentes texturas en función de tu tipo de piel, pero también debes saber qué es lo que necesita tu piel y lo que no debe faltar en tu cosmético. Vamos a resumir esto último en 3:

1. Humectantes. Atraen agua a la dermis, por lo que mejoran su capacidad de hidratación y la mantienen en niveles óptimos. Algunas de esas sustancias son propilenglicol, pantenol, alantoína, ácido hialurónico, urea o glicerina, entre otros.
2. Sustancias oclusivas. Se encargan de bloquear la humedad y evitan la evaporación del agua. Algunas de las más utilizadas son palmitato de isopropilo, dimeticonas y parafina líquida.
3. Sustancias reparadoras. Estas sustancias se encargan de mejorar la apariencia de la piel. Restauran la dermis y también son buenos emolientes. Las más utilizadas son retinil palmitato, bisabolol y ácidos grasos.

¿Qué hace que un cosmético sea mejor que otro?

Como ves, antes de escoger un cosmético debes prestar atención a sus principios activos, aditivos y excipientes. Ten en cuenta que estos últimos son los que van a determinar la textura final.

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