Probióticos
Para llevar una vida saludable hay que tener un equilibrio en todos los aspectos de nuestra vida, algo complicado de llevar en la gran mayoría de casos, debido a situaciones cotidianas como el estrés o la mala alimentación, nos pueden llevar a desequilibrar la flora intestinal. Por eso, son importantes los probióticos.
¿Qué son los probióticos?
Los probióticos son bacterias buenas que son iguales o muy similares a las bacterias que ya están en el cuerpo.
Son microorganismos vivos que forman la flora intestinal y que en ocasiones, se ven alterados por el estrés, los fármacos, la mala alimentación o enfermedades.
Hay más de 100 billones de bacterias viviendo en el sistema digestivo.
De hecho, entre el setenta y el noventa por ciento de todas las células en el cuerpo humano son bacterias.
La mayoría de estas células bacterianas no son patógenos, lo que significa que no causan enfermedad.
Podemos consumir probióticos a través de suplementos dietéticos pero también encontrarlos de forma natural en algunos alimentos que pueden encontrarse fácilmente en cualquier supermercado o tienda de alimentación, como por ejemplo, el yogurt, el queso, el chocolate negro, el vinagre de manzana o el suero de mantequilla natural.
¿Para qué sirven?
Los microorganismos realizan numerosas funciones esenciales en el sistema digestivo.
Por ejemplo, ayudan a descomponer los alimentos que consumimos y apoyan las células vitales para la absorción de agua y nutrientes que su cuerpo necesita.
También ayudan a mantener una función de barrera natural saludable a lo largo de su tracto digestivo.
Estas poblaciones de bacterias buenas compiten por el territorio y pueden impedir que las bacterias patógenas o «malas» crezcan fuera de control.
Los probióticos pueden ayudar a mantener el equilibrio saludable de la flora.
En lugar de esperar a que su salud digestiva se vea comprometida, puede tomar probióticos en forma de suplementos alimenticios para ayudar a minimizar los riesgos potenciales.
¿Cuándo tomar probióticos?
Además, puedes tomarlos en los siguientes casos:
- -Para el tratamiento de cólicos en lactantes así como de diarrea y de gastroenteritis infantil.
- –Infecciones como la candidiasis o la vaginosis bacteriana
- -Tratamiento con antibióticos
- -Eliminan bacterias nocivas, toxinas y gases